martes, 15 de noviembre de 2011

experimento #5 la moneda saltarina


Presentamos una pequeña experiencia que, probablemente, será muy divertida para los más pequeños. Pero que, como todas, también tiene su fundamento científico para los más mayores. Vamos a aprovecharnos de las variaciones de presión que produce el cambio de temperatura en el aire para hacer saltar una moneda.
¿Qué nos hace falta?
  • Una botella de vidrio
  • Una moneda
¿Qué vamos a hacer?
Vamos a meter durante un cierto tiempo la botella en el congelador del frigorífico, hasta que esté bien fría.
Al cabo de un cierto tiempo (por ejemplo, media hora) la sacamos y la dejamos de pié en cima de una mesa. 
A continuación, tapamos la boca de la botella con una moneda y observamos a ver qué pasa. Si hace falta espera un poco.

¿Qué es lo que pasa? ¿Por qué crees que ocurre esto?
¿Qué ha ocurrido?
Si has hecho bien el experimento, habrás podido ver como la moneda, durante unos minutos, da pequeños saltitos sobre la boca de la botella. Este efecto es debido a que, al sacar la botella del congelador, el aire que está en su interior está a una temperatura muy baja, al igual que la botella (aproximadamente -15 º C). Al colocar la moneda sobre la boca de la botella, estamos tapandola e impidiendo que entre o salga aire.
Cuando pasan unos minutos, como la temperatura de la habitación es más alta (pongamos +20 ºC), la botella comienza a calentarse y también lo hace el aire de su interior. El aumento de temperatura del aire contenido en la botella supone también un aumento de su presión, hasta que es suficientemente alta para hacer saltar la moneda y dejar escapar un poco de aire. Y vuelta a empezar.
La moneda seguirá saltando a intervalos cada vez más largos, mientras el aumento de temperatura del aire del interior provoque un aumento de presión suficiente para hacerla saltar.

Experimento #4 hielo instantaneo


Materiales:
Acetato de Sodio
Agua
Recipiente
Refrigerador
Procedimiento:
Lo primero que debes hacer es colocar al fuego medio o tres cuarto vaso de agua. Cuando está por comenzar a hervir, comienza a agregar el acetato de sodio mientras revuelves con una cuchara. Sigue agregando hasta que notes que ya no se disuelve mas acetato en el agua.
Ahora coloca la solución en un recipiente (puede ser un vaso) y lo llevas al refrigerador por 20 minutos. Asegúrate que cuando vuelques la solución, los cristales de acetato que pudieran haber quedado en el fondo no caigan al vaso.
Por último, lo sacas con cuidado del refrigerador y comienzas a divertirte con tu hielo instantáneo!!!

Experimento #3 Huevo en binagre

Los huevos de las aves constituyen un alimento habitual y básico en la especie humana, se presenta protegido por cáscara y su contenido es proteínas  (principalmente en albúmina  que es la clara o parte blanca del huevo) y lípidos, de fácil digestión, son el componente principal de múltiples platos dulces y salados, y son un complemento imprescindible en muchos otros debido a sus propiedades aglutinantes.
Un huevo de gallina consta de dos partes: la clara y la yema (parte nutritiva). Además su cáscara está formada por carbonato de calcio en un 94%.
Materiales:
  • Huevos crudos de gallina.
  • Vinagre.
  • Bote de cristal.
Procedimiento:
1) En nuestro bote o recipiente de cristal introducimos el vinagre, lo mas lleno posible.
2) Se toma un huevo de gallina y se sumerge en el recipiente que contiene vinagre. Se tapa dicho frasco para evitar que el olor poco agradable, tanto del ácido acético que forma el vinagre como del acetato de calcio formado, salga al exterior.
Veamos las reacciones dentro del recipiente
Vinagre + Cáscara de huevo —->; Gas

Ácido acético + Carbonato calcio —-> Dióxido carbono + Agua + Acetato calcio

El experimento de HUEVO EN VINAGRE requiere de un par de dias como minimo para que se complete la reaccion.
Poco a poco se va viendo cómo la cáscara se hace más fina hasta “desaparecer” en un tiempo aproximado de dos días; siendo en algunas ocasiones necesario renovar el vinagre. Estos cambios se deben a que el ácido acético que forma el vinagre, al reaccionar con el carbonato de calcio va desapareciendo; siendo necesario más reactivo (vinagre) para que el proceso continúe.
Además de perder la cáscara, la membrana semipermeable que envuelve a la célula y está situada inmediatamente debajo de ella, adquiere consistencia gomosa. Esto permite que se puedan llegar a realizar pequeños botes con el huevo sin que se rompa.

Experimento #2 pilas caseras

Objetivos:

El objetivo de estos experimentos caseros es demostrar que algunas disoluciones son capaces de conducir la electricidad mientras que otras no lo hacen. Es una experiencia muy sencilla y que no reviste peligrosidad por lo que puede realizarse en casa.

Fundamento Teórico:

El objeto de la electroquímica es estudiar la relación entre las reacciones químicas y las corrientes eléctricas a las que estas reacciones pueden dar lugar en determinadas circunstancias, así como la conversión de energía química en energía eléctrica y viceversa.

Materiales:

  • Recipiente
  • Vinagre
  • Sacapuntas de metal
  • pedazo pequeño de cobre
  • Cables eléctricos delgados
  • Led

Procedimiento:

1) Montar el circuito como se muestra en la figura:
2) Observaras que el Led se enciende, usamos el Led ya que requiere menor potencia para encenderse.

Explicación:

Las pilas caseras funcionan a partir de una reacción química que produce una corriente eléctrica.
La principal desventaja de este tipos de pilas es que proporciona una intensidad de corriente muy bajadebido a su alta resistencia interna, así que no siempre se va a conseguir que el aparato funcione.
Si contamos con un multímetro en casa, podemos medir la intensidad de la corriente obtenida y así buscar el aparato más adecuado a la corriente con la que contamos. En caso de que no sea así, lo más práctico es elegir el aparato con menor potencia de la casa, para que las posibilidades de éxito aumenten.

Experiencia #1 Brujula Casera

Materiales:
* Aguja de coser
* Imán
* Tijeras
* Bandeja con agua
* Elemento que flote (preferiblemente telgopor o poliestireno expandido)
Una aclaración sobre el elemento flotante. En mi caso, he utilizado un trozo de bandeja de poliestireno expandido, de las que se utilizan para embalar alimentos como fiambres y comidas rápidas. El poliestireno expandido se conoce con diferentes nombres, dependiendo de cada país. A continuación, algunos nombres: telgopor, Plastoformo, Isopor, Icopor, Estereofón, Plumavit, Poliespuma, Espuma-flex, Durapax, Porespan, Poliespan, Nieve Seca, Unicel, Tecnopor, Hielo Seco, Espuma plast, Anime, etc.
Procedimiento:
Lo primero es colocar un poco de agua dentro de la bandeja, de modo que nuestra brújula pueda flotar y moverse libremente en ella (casi sin rozamiento).
Ahora toma las tijeras y corta un pequeño círculo de la bandeja de poliestireno expandido. Para seguir, frota el extremo de la aguja sobre uno de los polos del imán.
Para terminar con esta brújula casera, coloca la aguja sobre el círculo que cortaste, y lo pones a flotar en la bandeja.
¿Como funciona?
Al frotar el extremo de la aguja sobre el imán, estamos “magnetizando” esa porción de metal. Las agujas están construidas de acero, el cual es un material muy ferromagnético y permite ese “magnetismo remanente” luego que alejamos el imán.
Realmente lo que ocurre es que dentro de un material ferromagnético, hay como pequeños imanes, muy diminutos. En condiciones normal están desordenados, por lo que la suma de sus polaridades es nula.
Pero cuando acercamos el imán, estamos orientando en la misma dirección a todos esos pequeños “imancitos”. Al retirar el campo magnético, algunos de ellos quedan orientadas así, es por eso que la aguja permanece magnetizada.
Por otro lado tenemos el campo magnético de la tierra, el cual es muy débil. Las líneas de este campo, van desde un polo hasta el otro. El polo norte geográfico, es el sur magnético, mientras que el polo sur geográfico representa el polo norte magnético.
Como nuestra brújula esta “flotando”, el líquido le ofrece poca resistencia al movimiento, y es por eso que el débil campo magnético de la tierra es capaz de atraer el extremo magnetizado y orientarlo en su dirección.